lunes, enero 05, 2009

Cuánta razón tenían los románticos,el boliviano no muere sin besar a una mujer

Por Miguel Lundin Peredo


CAPITULO 4

Me despertaron con un poco de agua sobre mi cuerpo,agua caliente,grite del susto que me produjo sentir el agua caliente sobre mi cuerpo,una mujer se acerco a mi,tenia una mascara folklorica andina cubriendo su rostro,me dijo que habia sido ingrata con ella, que habia roto sus ilusiones,pense que estaba loca,que no sabia lo que decia, porque yo nunca la habia conocido anteriormente,pero habia algo en su voz que delataba que mis oidos la habian escuchado en el pasado,con la mente anestesiada por el somnifero, mire el color de sus cabellos, esos cabellos, la estatura de la mujer,me eran muy familiares,pero al mismo tiempo no me ayudaban a saber quien era ella en realidad,la mujer me dijo que me prepara para un combate mortal en el ring,le dije que no lucharia,me mostro a una niña vagabunda que seria fusilada si yo no luchaba con ella,el chantaje resulto,decidi luchar contra ella,me entregaron vestimenta de gladiador romano y una espada, esa mujer debia saber muy bien, que yo era experto en esgrima, por eso me daba la espada,me prepare mentalmente para ese combate a muerte,pensando que ella hablaba en serio.
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