LO FANTÁSTICO EN “98 SEGUNDOS SIN SOMBRA” de Giovanna Rivero

 

Por Ivan Prado Sejas

Giovanna Rivero, en su obra “98 segundos sin sombra”, nos conduce por un laberinto abigarrado, donde la realidad se hace fantasía, y la fantasía emerge de un subconsciente en erupción. Este subconsciente es una “olla hirviendo, llena de fantasmas o de ángeles” de acuerdo a las características de cada persona. Dentro de la dinámica Figura-Fondo, Fritz Perls veía en el Fondo (el subconsciente), el depósito de todas las “maravillas” o “excrementos” que el hombre había almacenado a lo largo de su vida. Figura (el consciente) era lo emergente; lo vivido en un instante. En la novela, la toma de conciencia (capacidad de darse cuenta) surge en “segundos”, y el tiempo holístico matiza la historia. En el contenido, Giovanna Rivero hace hablar al subconsciente y de esa manera salen cosas introyectadas. Dentro el enfoque gestalt lo introyectado es todo aquello que el individuo se “traga” y el resultado es la vida personal en función de las expectativas de los otros.

La trama se centraliza en la vida de Genoveva, quien es la protagonista principal que muestra sus impulsos subconscientes a flor de piel. Asimismo, Genoveva, intenta ser ella misma a pesar de los esquemas perceptivos rígidos de sus padres y de un entorno basado en clichés. A momentos, en segundos, ella “vomita” sus introyectos para ser. El referente externo lo envuelve y lo quiere engullir pero ella se resiste. Therox es la ciudad híbrida donde Genoveva tiene su existencia, y sus vivencias reflejan las subculturas emergentes. En esta ciudad, combinación de provincia y ciudad moderna, Genoveva vive en el vaivén de la realidad y la irrealidad.

En la novela se conjuncionan elementos de realidad, fantasía y realismo mágico y esto le da a la obra una estructura narrativa muy particular que al principio de la lectura puede aturdir, pero en la medida que se ingresa en la trama uno se encamina por el sendero fantástico. El manejo del tiempo y el espacio en la historia es holístico, si bien en el contexto total emerge un principio y un final, el tiempo vivido por los personajes es en el eterno presente. Las escenas están bien descritas, en términos de ambientación y vivencia. Lo social y lo político emergen como un añadido importante, para entender el contexto en el que actúan los distintos personajes. Se da una crítica directa a la izquierda infantil y a las creencias místicas a través de la vivencia de ciertos personajes. Dentro el marco referencial filosófico y psicológico, existe una búsqueda permanente —de la protagonista principal— del sentido de la vida en una sociedad compleja. Los otros personajes son bastante heterogéneos, con roles muy dispares.

Con su novela, Giovanna Rivero proyecta “98” segundos de intensa vivencia y que significa toda la existencia de alguien que busca la libertad. El inicio es melancólico y muestra un ambiente deprimente, donde la protagonista empieza a desnudar sus emociones. En el ámbito socio-político, la figura paterna se presenta como el opresor que refleja la caducidad de una ideología, y la figura materna tiene dos vertientes, una, perdida en el misticismo barato (la madre), y la otra, que en verdad, representa el sustento psicológico maternal (la abuela). Lo social y lo político están inmersos en los propios personajes, sin necesariamente proyectarse al mundo externo. Toda persona vive en el mundo y, el mundo vive en ella. Asimismo, Giovanna maneja magníficamente el juego de las polaridades emocionales proyectadas en los sentimientos de los personajes. Por esto, Therox es un crisol de experimentación vivencial. En la terapia gestalt se generan situaciones donde se induce a los pacientes a exagerar las situaciones vivenciales polarizadas, para que luego se de la asimilación o el desalojo de recuerdos traumáticos, y Giovanna Rivero hace con que cada personaje “exagere” su rol para que la Figura resalte. Salen del subconsciente aspectos que generalmente son reprimidos en la vida cotidiana. La idea de la autora es mostrar la personalidad en toda su crudeza. El espíritu aparece un segundo quizá, pero sí, está a la espera, latente.




Giovanna Rivero, escritora boliviana, es una autora multifacética cuya producción es amplia y variada. Entre sus obras se puede mencionar: Las Camaleonas (2001), Tukzon, Historias Colaterales (2008), y Helena 2022: La vera crónica de un naufragio en el tiempo (2012, CF), Cuentos: Nombrando el Eco (1994), Las Bestias (1997), La Dueña de nuestros Sueños (2002), Sentir lo Oscuro, Libro de fotografías de Kathy Leonard y cuentos de Rivero (2002), Contraluna (2005), Sangre Dulce, (2006) y Niñas y detectives (2009). Sus obras Tukzon, Helena 2020 y 98 segundos sin sombra, se proyectan a la literatura fantástica, puesto que tienen elementos de ciencia ficción y de relato fantástico, respectivamente.

“98 segundos sin sombra”, de Giovanna Rivero, es una obra que conduce al análisis de la búsqueda de la libertad (deseo de salir del “capullo” familiar). Es una obra que desnuda al subconsciente, y lo muestra en distintas facetas existenciales (Ese subconsciente tiene cara de mujer). La autora parece decir “hay que reunir nuestros propios fantasmas para ver si ellos son fantasía o realidad partiendo de la propia experiencia vivencial”. En ese contexto, la obra induce a un viaje por los vericuetos de la mente humana. En ese desplazamiento vivencial aparecen ironías, fachadas emocionales y máscaras caracterológicas. La vida es también lo que ocurre en la mente, “ahora”, y no necesariamente lo que sucede “allá”, entonces.

Considero que “98 segundos sin sombra” es una obra con contenido intenso, apropiada para jóvenes y adultos. A los jóvenes les inducirá a la toma de conciencia de una etapa fundamental en la vida, como es la adolescencia, sobre todo en su fase de crisis existencial. Por otro lado, a los adultos les llevará a reconocer los efectos perniciosos de aquellos comportamientos cristalizados que surgen dentro de una sociedad en decadencia. En estas circunstancias, la novela es como una película que incentiva al lector a realizar un seguimiento cercano de los personajes por intermedio de sus vivencias dentro de un trasfondo psicosocial sui generis.